Los legisladores deben garantizar que las leyes sobre homicidios y crímenes cometidos en nombre del “honor” incluyen disposiciones sobre campañas de educación y sensibilización de la opinión pública. Las campañas informativas deben ir orientadas a eliminar las ideas negativas que discriminan a las mujeres y las niñas y a aumentar la comprensión sobre la igualdad de género y los derechos de las mujeres y las niñas. Además, jueces, fiscales, organismos encargados de hacer cumplir la ley, servicios de protección de la infancia, educadores, proveedores de atención de la salud, medios de comunicación y activistas deben recibir formación para entender los crímenes cometidos en nombre del “honor”, sus causas, efectos, indicadores y los medios y recursos de que disponen las mujeres y las niñas víctimas de este tipo de homicidios y crímenes o que corren peligro de convertirse en tales.
Las leyes deben garantizar que entre los destinatarios del programa se incluye a líderes comunitarios y religiosos, jóvenes, comunidades en situación de riesgo, incluidas comunidades de inmigrantes y de minorías étnicas, medios de comunicación, y sectores de servicios sociales, educativos y de atención de la salud que trabajan con menores.
- Las actividades de divulgación entre instituciones y líderes religiosos y tradicionales deben intentar ofrecerles educación en derechos humanos, además de conseguir que se comprometan a condenar públicamente los crímenes cometidos en nombre del “honor”. Véase: Hacia la erradicación de los delitos de honor cometidos contra la mujer y la niña, A/RES/59/165 (2004), párrafo 3.d; Resolución 1681 del Consejo de Europa (en inglés), adoptada en 2009, párrafo 4.5-4.7; Los derechos civiles y políticos, en particular las cuestiones relacionadas con las desapariciones y las ejecuciones sumarias. Las ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias,E/CN.4/2001/9, párrafo 41.
- La educación pública de las mujeres y las niñas debe ofrecerles información sobre violencia por motivos de “honor”, sus derechos, cómo denunciar esos delitos y obtener protección, y los proveedores de recursos y servicios que pueden prestarles ayuda.
- La educación pública de los proveedores de servicios y de los sectores que trabajan con menores debe incluir información específica sobre detección del riesgo de que se produzca un crimen de “honor”. Véase: Estrategias para el tratamiento informativo de la violencia por motivos de género en los medios de comunicación (en inglés), StopVAW, The Advocates for Human Rights.
- Las campañas de sensibilización pública también deben dirigirse a los medios de comunicación, para concienciarlos sobre las violaciones de derechos humanos asociadas a los crímenes cometidos en nombre del “honor” y alentarlos a que informen de estos delitos de un modo respetuoso y manteniendo la privacidad y dignidad de la víctima. Los medios de comunicación deben recibir formación sobre cómo informar sobre la dinámica de la violencia contra las mujeres y los crímenes de “honor”. Véase la Resolución 1699 del Consejo de Europa, párrafo 4.7. Véase: La necesidad urgente de combatir los denominados “crímenes de honor” (en inglés) Consejo de Europa, 8 de junio de 2009; Estrategias para el tratamiento informativo de la violencia por motivos de género en los medios de comunicación (en inglés), StopVAW, The Advocates for Human Rights.
- Las iniciativas de concienciación pública también deben dirigirse al sector jurídico, incluidos jueces, fiscales y policía, mediante formación sobre la dinámica de la violencia por motivos de “honor” y los derechos humanos de las mujeres.