En muchos países, la capacidad del sector justicia no es adecuada para atender las necesidades de las mujeres y niñas sobrevivientes de violencia. En muchas partes del mundo se carece del conocimiento básico sobre las formas de violencia de género y sus efectos sobre mujeres y niñas. El abordaje de la violencia contra las mujeres ha sido, durante mucho tiempo, de baja prioridad para gobiernos estatales y esto se refleja en presupuestos públicos inadecuados para sistemas diseñados para víctimas de la violencia y para capacitar a actores en los sistemas. Los juzgados especializados que tienen experiencia en violencia de género deben estar ampliamente disponibles y deben complementar la base de conocimiento de otros tribunales. Los estados deben dedicar suficientes recursos para la infraestructura de los juzgados, incluyendo computadoras, equipos de oficina y salas de tribunales seguras. Los estados deben establecer, mantener y actualizar los sistemas de recolección de datos sobre los casos de violencia para documentar la frecuencia de la violencia, para mantener un control de los agresores reincidentes de modo que los perpetradores no puedan evitar las consecuencias de la reincidencia, y más importante aún, para mejorar la seguridad de las mujeres y niñas. El personal de justicia, incluyendo los administradores de los tribunales, actuarios, alguaciles y jueces, árbitros y magistrados, en todos los niveles del tribunal debe recibir formación de actualización regularmente, no solo sobre las leyes, sino sobre todos los aspectos de la violencia contra las mujeres y niñas y los problemas que enfrentan las sobrevivientes. Estas capacitaciones deben ser financiadas con fondos del estado, involucrar a ONG que promueven los derechos de las mujeres y deben estar respaldadas por protocolos y guías integrales que promuevan la seguridad de la víctima y la responsabilidad del agresor.
Proporcionar formación y desarrollar capacidades
Última editado: December 20, 2011