Planificación y diseño de espacios públicos seguros para las mujeres y niñas

Última editado: October 30, 2010

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¿Qué significa planificación y diseño de espacios públicos seguros para las mujeres y niñas?

La planificación y diseño de espacios públicos seguros para las mujeres y niñas significa crear espacios públicos con ciertas características que realcen la seguridad y la sensación de seguridad de las mujeres, y eliminen los elementos que les causan inseguridad o sensación de inseguridad. Al planificar y diseñar espacios públicos seguros para las mujeres, los planificadores, diseñadores y arquitectos prestan especial atención a la iluminación, paisajismo, visibilidad, tránsito vehicular, tránsito peatonal, mobiliario urbano, posibles lugares de escondite, señalización, personal de seguridad, proximidad a otros espacios públicos, proximidad a servicios de emergencia, y acceso al transporte público. Cada una de estas áreas recibe especial consideración desde la perspectiva de las mujeres y niñas que usan los espacios públicos.

La planificación y diseño seguros también implican algo más que simplemente las características físicas del espacio, aunque a este nivel las intervenciones pueden realizarse primero en el marco de un programa de ciudades seguras para las mujeres (Werkerle, 2000, 47). Necesariamente, se trata de un proceso participativo en el cual los miembros de la comunidad (especialmente las mujeres) trabajen juntos para crear espacios que propicien las relaciones sociales fuertes. Para tener éxito, los planificadores y diseñadores deben prestar atención a cómo se expresan las personas en los espacios públicos y cómo interactúan con ellos. En cualquier día típico, los espacios públicos son el escenario de una miríada de interacciones sociales marcadas por el género. Como resultado de estas interacciones, los mismos espacios públicos están marcados por el género. Por ejemplo, en el recreo de una escuela, las niñas pueden reunirse bajo un árbol en particular y mirar a los niños jugar al fútbol en la cancha. En la medida que esta práctica continua, el espacio bajo el árbol se conocerá como un “espacio de niñas” y la cancha de fútbol se conocerá como un “espacio de niños”. Esto puede ser problemático porque el espacio público debe pertenecer a todos, y todos deben tener derecho a usarlo – las niñas deben sentirse en libertad de usar la cancha de fútbol y los niños deben sentirse en libertad de sentarse bajo el árbol. Por lo tanto, la planificación y diseño de espacios públicos seguros para mujeres y niñas también significa hacer un análisis de los varios usos de los espacios públicos, quién los usa, cuándo, y durante cuánto tiempo. Este tipo de planificación y diseño también plantea quién no usa este espacio público en particular, cuándo y por qué no. Esto es porque cuando ciertos grupos, como las mujeres o las niñas, no usan un espacio, generalmente es un indicio de que el espacio se percibe como inseguro para las integrantes de ese grupo

La planificación y el diseño de espacios públicos para las mujeres y las niñas, requiere prestar atención permanente a las características físicas y sociales del espacio. También requiere constante evaluación de las implicaciones sociales y físicas del proceso de planificación y diseño. La planificación y diseño de un espacio tiene el potencial de reforzar las desigualdades de género o por el contrario avanzar hacia la equidad de género. Por esta razón, el proceso y la planificación es una etapa crucial en la construcción de ciudades seguras para las mujeres y niñas.

El género es un elemento importante a considerar en la planificación y el diseño de servicios esenciales en las comunidades. A menudo, cuando los servicios esenciales están mal planificados o son inexistentes, las mujeres y las niñas son las que más sufren la inseguridad que suele acompañar a tales situaciones. Por ejemplo, “el acoso sexual es común cuando las niñas salen a la intemperie a defecar. Los hombres se disfrazan de mujer y se esconden en los campos… Hubo casos de niñas secuestradas en los campos y de hombres capturados por acosarlas sexualmente. Después de las 11 de la noche, las niñas generalmente tienen prohibido salir al campo a menos que vayan acompañadas por una persona mayor” (Plan International, 2010, 56).

La planificación y diseño de espacios públicos seguros para las mujeres y niñas es el proceso por el cual los planificadores urbanos, diseñadores, arquitectos, mujeres, comunidades de base y otros actores comunitarios, colaboran para crear los elementos físicos de los espacios públicos, seguros y acogedores para las mujeres y niñas. Si los espacios públicos están oscuros, abandonados, sucios, con la vegetación descuidada, o si les faltan ciertos elementos como bancos o teléfonos de emergencia, entonces son potencialmente inseguros para todos, y para las mujeres y niñas en particular. Por lo tanto es más probable que las mujeres y niñas no usen esos espacios donde temen ser víctimas de violencia o lo son. En una iniciativa de ciudades seguras para Ias mujeres y niñas, es necesario que las necesidades de seguridad de ambas sean tomadas en cuenta en la planificación y diseño. La experiencia demuestra que cuando un espacio es ocupado por mujeres y niñas, también es ocupado por más personas en general. Las calles, parques, paradas de autobuses, campos de deporte, plazas, estacionamientos, etc. que han sido planificados y diseñados de acuerdo a las necesidades de seguridad específicas de las mujeres y niñas, presentan las siguientes características:

  • Fácil acceso hacia y desde el lugar
  • Fácil movilidad dentro del lugar
  • Buena iluminación para que los usuarios puedan ver y ser vistos
  • Señalización fácil de leer para ayudar a los usuarios a ubicarse
  • Caminos limpios, bien mantenidos donde los usuarios puedan verse unos a otros con facilidad
  • Visibilidad general de todo el lugar, libre de lugares donde alguien pudiera esperar escondido
  • Prevé variedad de usos– muchos lugares para pasar el tiempo, caminar, jugar, comer, hacer ejercicio, etc., para diferentes grupos a distintas horas del día.
  • Previsiones para las diferentes estaciones del año (sombra para la época de calor, y protección para la época de frío).
  • Instalaciones para niños pequeños y adultos mayores (porque las mujeres con frecuencia son cuidadoras) por ejemplo, en áreas urbanas se pueden necesitar veredas bajas y anchas para los coches de bebé, sillas de ruedas, y andadores, y áreas de poco tránsito.
  • Acceso a baños limpios, seguros y de fácil acceso con espacio para cambiar pañales.

 

¿Por qué es importante la planificación y diseño de espacios públicos para mujeres y niñas?

La planificación y diseño para las mujeres y niñas es importante porque crea espacios públicos donde las mujeres y todos los usuarios tienen igualdad de oportunidades para estar sanos, seguros y felices. Este tipo de planificación está basada en el hecho que el diseño físico de los espacios urbanos afecta el uso de las mujeres y el disfrute de la esfera pública.

Diseñar y planificar espacios públicos seguros para las mujeres y niñas es importante porque:

  • Crea conciencia sobre el hecho que el espacio no es neutral; el diseño de los espacios puede facilitar o impedir su uso, apropiación y seguridad para las mujeres y niñas.
  • Reconoce que el género y las relaciones de género entre mujeres y hombres son factores importantes para la organización y desarrollo de los espacios urbanos.
  • Reconoce que la ciudad refleja espacialmente las características sociales, económicas e históricas que son exclusivas de las situaciones sociales de las mujeres locales.
  • Reconoce que los espacios en la ciudad reflejan las relaciones de poder que determinan los comportamientos y diferencias en las vidas de las mujeres y los hombres.
  • Reconoce que los espacios públicos en una ciudad generalmente están diseñados en base al concepto tradicional de familia y en la división tradicional de trabajo entre mujeres y hombres (hombres que trabajan en el espacio público y mujeres como amas de casa y proveedoras de cuidados en la casa y en los espacios privados). Además, promueve las iniciativas de cambio en esta organización espacial para que refleje los cambios en los roles de género en la sociedad.
  • Reconoce que los temores de las mujeres están basados en la realidad (la relación entre sensación de miedo y experiencias de violencia) y que las mujeres saben cuándo y dónde se sienten inseguras en las ciudades y por qué.
  • Es una herramienta poderosa para mejorar la calidad de la vida urbana y comunitaria y para reducir el temor de las mujeres y su victimización.
  • Reconoce que si las mujeres y las niñas evitan usar ciertos espacios públicos porque no se sienten seguras, estos espacios se volverán aún más inseguros para ellas y otros usuarios. Por lo tanto, es útil también mejorar la calidad de la vida urbana y comunitaria para todos, y reduce el miedo de las mujeres y su victimización.
  • Promueve el derecho de las mujeres y niñas a la ciudad y la ciudadanía como una condición para tener ciudades y comunidades equitativas.

 

Lecciones aprendidas:

La mejor forma de asegurar que los espacios son acogedores para las mujeres y niñas es consultando con las destinatarias del espacio. Sin embargo, a las mujeres y niñas les puede resultar difícil participar en las consultas públicas de planificación y diseño por una variedad de razones. Cualquier persona u organización que desee involucrar a las mujeres y niñas en la planificación de espacios públicos debería considerar la siguiente lista:

Las mujeres pueden no asistir a las consultas públicas para la planificación de comunidades más seguras porque:

  • Tienen dificultad para llegar o volver de las reuniones
  • No tienen conciencia de la problemática de la inseguridad de las mujeres porque hay poca discusión pública o mediática sobre el tema.
  • Pueden haber internalizado/aceptado las formas de violencia de género (por ejemplo, acoso sexual) como normales y no las perciben como un problema.
  • Tienen dificultad para leer los materiales para la consulta.
  • No pueden pagar por un servicio de cuidado para sus hijos durante el tiempo que duran las reuniones de consulta.
  • No tienen tiempo de participar en las reuniones debido a sus compromisos laborales/familiares y voluntariado.
  • Las reuniones de consulta porque se llevan a cabo a horas inconvenientes.
  • Su cultura no apoya estas actividades.
  • No cuentan con el apoyo de sus cónyuges o amigos.
  • Temen hablar en público.
  • Son pobres y no tienen sentido de pertenencia.
  • Están discapacitadas y no pueden acceder al lugar donde se llevan a cabo las reuniones.
  • No saben que existen recursos para planificar comunidades que apoyen la seguridad de las mujeres.
  • No tienen computadoras para acceder a la información sobre las consultas.
  • No hablan la lengua que se usa durante las reuniones.
  • Tienen otras preocupaciones personales más urgentes, tales como pobreza y problemas de salud.
  • No pueden encontrar el lugar donde se lleva a cabo la reunión.
  • No se sienten seguras en el lugar donde se lleva a cabo la reunión.
  • No tienen tiempo porque deben cuidar a miembros mayores de la familia.
  • Creen que no son lo suficientemente inteligentes para participar en la consulta.
  • Han tenido malas experiencias cuando participaron en reuniones públicas anteriormente.
  • Se sienten intimidadas por los grupos numerosos y/o autoridades públicas.
  • No se sienten seguras hablando frente a hombres.
  • Sienten que por su edad sus preocupaciones son irrelevantes (sean jóvenes o mayores).
  • Son apáticas ante los asuntos públicos.

 

Fuente: Dame, T. and A. Grant. 2001. Kelowna Planning for Safer Communities Workshop Report. Cowichan Valley Safer Futures Program, Canadá: pág. 17. Disponible inglés.

Vea la sección sobre creación de espacios públicos en la sección de implementación de programas.